“El mayor ideal de la curación consiste en restablecer lo más pronto, suave y permanente el estado de salud. La eliminación de la enfermedad en toda su extensión por el camino más corto, seguro y menos dañino, apoyándose sobre principios claros y fácilmente comprensibles“
Samuel Hahnemann
¿A qué le llamamos curar? Probablemente, muchos se referirán a cuando un paciente utiliza un recurso externo para aliviar el síntoma. Estos recursos externos que pueden ser los fármacos, intervención quirúrgicas, entre otros, sólo esconden, maquillan y alivian temporalmente los síntomas.
Pero, ¿qué sucede cuando los síntomas reaparecen o se presentan con manifestaciones más graves? Eliminar su síntoma original fue un gran error. Este sólo era la limitación natural del cuerpo para evitar que el mal permanezca, crezca y produzca mayor daño.
Para sanar, se necesita estimular el recurso interno del cuerpo. Nuestro cuerpo tiene la capacidad de transformar la debilidad en fortaleza. Así recuperar el equilibrio y estado de salud.
¿En qué consiste la perfecta curación?
En homeopatía, cuando hablamos de curación perfecta nos referimos a 3 principales conceptos:
1. Restablecer la salud
Restablecer la salud es el primer objetivo del médico para poner orden al ser humano enfermo. Eliminar un grupo de síntomas pero sin que el paciente se sienta completamente restablecido en su salud, no es una curación. La idea es que el paciente experimente una mejoría interna a medida que un síntoma desaparece, lo que ocurre cuando la enfermedad ha sido curada y se ha restablecido el orden.
2. Curación pronta, suave y permanente
El restablecimiento de la salud, que anteriormente describimos, debe realizarse pronto, tranquilo y permanente. Para que la curación sea suave es necesario que siga la corriente natural, se adapte al desorden interno del enfermo y lo restablezca. Los beneficios para el paciente serán permanentes.
3. Sobre los principios que deben ser claros y fácilmente comprendidos
La homeopatía tiene principios fijos que deben seguirse adecuadamente para restablecer la salud en modo suave, pronto y permanente.
El arte de la curación con homeopatía se da del centro hacia la periferia, es decir, de arriba hacia abajo, de adentro hacia afuera, de los órganos más importantes hacia los menos importantes, de la cabeza hacia los pies. Además, los síntomas deben desaparecer en el orden inverso a su aparición. Sólo así la curación será de manera definitiva.
Esto tiene su explicación porque las enfermedades crónicas progresan de afuera hacia adentro. Sus primeras manifestaciones son en la superficie y desde allí se dirigen a los planos más internos del cuerpo. Por ello, el enfermo recobrará la salud a medida que se logre retroceder a la superficie las manifestaciones primarias de la enfermedad.
En conclusión
El deber del médico consiste en descubrir el desorden dentro del cuerpo. Ver hacia adentro la totalidad de los síntomas, que es cómo se expresa la enfermedad. Luego, restablecer la salud con medios suaves, ordenados desde lo más interior hacia lo externo, que le devuelvan la fuerza vital. Todo esto basándose en los principios fijos y la administración de los medicamentos homeopáticos.
Disclaimer: La información que compartimos en este sitio tiene propósitos informativos y no reemplaza la atención con un profesional de la salud. Ante cualquier duda siempre consulte con su médico. Si deseas una consulta personalizada con el Dr. Javier Ortega nos puedes contactar por WhatsApp +51 987 774 871 para separar tu cita.
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