¿Cómo tratar la depresión con homeopatía?

La depresión es un transtorno mental que se caracteriza por un bajo estado de ánimo y sentimientos de tristeza o vacío que alteran el comportamiento y pensamiento de la persona. Los síntomas permanecen por varias semanas o meses e incluyen cambios en el apetito, mucho o poco sueño, ansiedad, pesimismo, desesperanza, irritabilitad, culpa, aislamiento, ya no disfrutan las actividades que antes les gustaba, poca concentración, mala memoria, entre otros.

La depresión, al igual que otros trastornos de la salud mental, deben ser diagnosticados por un profesional de la salud. Es importante que pidas ayuda si sospechas que estas experimentando una depresión. Existen varias estrategias que te ayudarán a sentirte mejor.

En el siguiente artículo exploraremos alternativas naturales para tratar la depresión.

¿Cómo puede la homeopatía ayudar para la depresión?

La medicina complementaria o no convencional trata a la persona con un todo y aborda las causas subyacentes de la enfermedad. Cuando se trata de trastornos emocionales o mentales, los médicos homeópatas tienen una caja de herramientas para abordar la depresión, incluyendo tratamiento con medicina homeopática, flores de Bach, nutrición y asesoramiento.

Nuestros pacientes recurren a nosotros explorando opciones de tratamiento naturales en combinación con medicamentos, o incluso antes de recurrir a ellos.

Para todos los casos es importante que el médico homeópata los evalúe primero y eliga un tratamiento personalizado basado en el fondo emocional y psicológico de cada paciente, los síntomas específicos y características generales del paciente.

Algunos de los medicamentos más usados para depresión son:

Arnica: para depresión a partir de accidentes o traumas físicos o emocionales.
Arsenicum Album: para tristeza y sensación de que la muerte los acecha.
Aurum Metallicum: para depresión con tendencias suicidas, alternadas con episodios de histeria.
Cheledonium: para depresión por el presente y futuro en personas materialistas, realistas y prácticas.
Cimifuga: para depresión post parto.
Drosera: para depresión por el futuro.
Gelsenium: para depresión originada por una mala noticia y la persona se paraliza.
Ignatia: para depresión por un gran disgusto y no es exteriorizado.
Kalium Phosphoricum: para depresión por agotamiento.
Natrum Muriaticum: para depresión después de un desegaño y que al ser consolado solo se empeora el cuadro.
Natrum Sulphuricum: para personas deprimidas con tendencia al llanto, irritables por la mañana y agravación de los síntomas entre las 4 y 5 am.
Phosphoricum Acidum: para depresión con apatía, indiferencia y desinterés.
Psorinum: desesperanzado, lleno de miedos y malos presentimientos.
Sepia: gran pesimismo.

¿Cómo puede la alimentación ayudar a la depresión?

Carbohidratos y proteínas

Los cambios en el estado de ánimo, concentración, atención, habilidad para pensar y los niveles de energía, están relacionados con las fluctuaciones en los niveles de azúcar en la sangre. Los carbohidratos refinados como harinas blancas, arroz blanco y otros alimentos o bebidas azucaradas son de absorción rápida y provocan estas subidas y bajadas drásticas en tus niveles de azúcar en la sangre.

La clave está en consumir carbohidratos de absorción más lenta como arroz integral, pan integral, quinua, etc. Así ayudarás a mantener los niveles de azúcar en la sangre más estables y consistentes a lo largo del día.

Además, las proteínas contienen un aminoácido llamado tryptophan que interactúa en la producción de la serotonina o también llamada hormona de la felicidad. Es más beneficioso consumir la proteína acompañada de un carbohidrato complejo ya que el aminoácido requiere ayuda de la insulina para ingresar a la sangre y finalmente transformarla en serotonina.

Come porciones pequeñas con mayor frecuencia

Otra recomendación es comer porciones pequeñas cada 2 o 3 horas en lugar de sólo 3 comidas grandes durante el día. Esto te ayudará a mantener estables tu nivel de azúcar en la sangre.

Aceite de pescado

El aceite de pescado contiene un espectro completo de tipos de omega-3, entre ellos el EPA (ácido eicosapentaenoico). El EPA ha sido estudiado a profundidad y se ha demostrado que mejora los estados de ánimo y la capacidad de atención. El salmón y la caballa son las mejores fuentes de EPA.

Vitamina B

Las vitaminas B participan en diferentes funciones del cerebro incluyendo la producción de neurotransmisores. Varios estudios demuestran que hay un vínculo entre bajos niveles de vitamina B12 y síntomas de depresión. Al incrementar tus niveles de B12 notarás una mejoría en tus síntomas. La vitamina B12 la encuentras en granos integrales, quinua, espárragos, champiñones, huevo, levadura.

En resumen, asegúrate que tu dieta incluya los siguientes alimentos:

Alimentos altos en proteínas: pescado, pollo, camarones, yogurt griego, almendras, nueces, legumbres, entre otros.
Carbohidratos complejos: arroz integral, avena, quinua, pan integral, entre otros.
Omega 3 y EPA: salmón y caballa.
Vitamina B12: granos integrales, quinua, espárragos, champiñones, huevo, levadura.

Más información

Si quieres entender más sobre cómo la homeopatía puede ayudarte para la depresión, no dudes en escribirnos:

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